Tanque Chieftain MK-5. TAMIYA 35068

Kit de plástico para montar un tanque Chieftain MK-5. El Chieftain es una de las armas del campo de batalla más conocidas de hoy en día, así como uno de los vehículos de combate con blindaje y armamento más pesado. El Chieftain es el resultado de la experiencia de Gran Bretaña en la Segunda Guerra Mundial y refleja lo que los militares ingleses consideraban más importante en cuestión de armamento, protección y movilidad. El rasgo más distintivo es el cañón L11 de 120mm. Podía disparar APDS (proyectiles perforadores de blindaje) y HESH/HE (proyectiles altamente explosivos/explosivos). Cuenta con una ametralladora de puntería integrada en el casco, con un visor con marcas que indican la munición apropiada. Puede corregirse rápidamente el visor, observando los aciertos de la ametralladora de puntería en el objetivo. Esta técnica óptica relativamente sencilla se había desarrollado para las últimas versiones de Centurion y se desarrolló más para el Chieftain. Así, los artilleros ingleses tenían muchas probabilidades de conseguir un blando directo en los primeros disparos, algo muy importante cuando la capacidad de almacenaje de munición es limitada y el enemigo puede contar con más tanques. Para los disparos indirectos, se utilizaba el tambor y el clinómetro tradicionales. L a cúpula, que puede girar en ambos sentidos, permitía al comandante marcar rápidamente los objetivos y, con un visor conectado al del artillero, podía apuntar el cañón él mismo. La cúpula también disponía de una ametralladora, que podía manejarse a distancia con la cúpula cerrada. El visor principal del comandante se encontraba en la parte giratoria de la cúpula, mientras que en la parte fija había nueves periscopios que daban una visión completa. El cañón se estabilizaba cuando estaba elevado y la torreta se estabilizaba en acimut, de forma que el cañón podía disparar con mucha precisión, incluso cuando el vehículo estaba en movimiento. En el lateral izquierdo de la torreta había un pequeño reflector, con luz blanca o de infrarrojos, para los combates nocturnos. Asimismo, los visores del comandante y del artillero tenían infrarrojos y el foco del comandante disponía de un filtro de infrarrojos. El asiento inclinado del conductor estaba flanqueado por los almacenes de batería y munición. Además, había un periscopio detrás de su escotilla. Las palancas de cambio eran convencionales y el sistema de transmisión diferencial es de Merritt, automático con un pedal de cambio de marcha. La superestructura sobresale sobre las cadenas, para que el anillo de la torreta pudiera tener el diámetro necesario. El Chieftain siguió evolucionando a lo largo de todos sus modelos