El kit incluye 21 piezas de plástico ya pintadas que no requieren pegamento para su ensamblaje.
Los dos jedis Anakin y Obi-Wan no están solos en la Batalla de Coruscant, sino que les escolta un escuadrón de ARC-170 (naves de reconocimiento muy agresivas). Leales a la República, los pilotos clon tienen la misión de distraer a las naves de la Federación de Comercio y despejar el camino a los jedis. Con la obediencia innata de la que les proveen en la estación de Kamino, estos valientes guerreros se sacrifican voluntariamente para que los jedis puedan llevar a cabo su misión. Sin embargo, los clones tienen acceso a las cualidades del cazarrecompensas Jango Fett y se ponen ante el enemigo sin temer a la muerte. Este caza de reconocimiento cuenta con un hiperimpulsor clase 1,5, torpedos y cañones láser. Debido a esto, resulta menos maniobrable que el Jedi Starfighter, por lo que su destino únicamente depende de la destreza de los tres hombres que forman la tripulación.